La escasez de agua que afecta a diversas regiones de Europa ha ofrecido un inusual lienzo al artista suizo Francoise Mothoux. Aprovechando la sequía que deja al descubierto las orillas del río Toleure, Mothoux ha dedicado su talento y paciencia a construir una ciudad en miniatura completamente de arcilla. Este proyecto no es solo una exhibición de habilidad artística, sino también una fascinante obra de arte efímero que atrae a visitantes europeos. El joven artista, de 30 años, lleva tres años consecutivos realizando este trabajo, sabiendo que la primera lluvia inevitablemente lo deshará todo, un recordatorio poético de la temporalidad de la naturaleza y el arte. Descubre los detalles de esta admirada obra que desafía al tiempo.

Elizabeth Marina.

¡ÚNETE A NUESTRO CANAL DE DIFUSIÓN DE WHATSAPP Y ENTÉRATE DE LA INFORMACIÓN AL MOMENTO! CLIC AQUÍ