Mordedura de serpiente deja al descubierto la falta de insumos básicos en el Hospital Regional Gilberto Gómez Maza
Un adulto de Villaflores fue mordido por una serpiente cascabel; aunque le salvaron la vida, la familia vivió un viacrucis para conseguir el antídoto.
El padre de Carmen, un adulto mayor de 63 años, realizaba limpieza en su rancho, en el municipio de Villaflores. Sin querer, pisó una serpiente de cascabel. Aunque logró sobrevivir, el acceso al antídoto pudo costarle la vida.
Me dice que como calambres, le dio calambres y dolor de pies, nada más.
Los problemas comenzaron cuando, tras la mordedura, fue trasladado de urgencia al Hospital Regional de Villaflores. Ahí, los médicos confirmaron la gravedad de la situación: requería suero antiofídico de inmediato. Posteriormente, llegó al Hospital Dr. Gilberto Gómez Maza, de la Secretaría de Salud estatal, a cargo de Omar Gómez Cruz. Sin embargo, en ninguno de los dos hospitales contaban con el antídoto necesario. Esto, aunado a los insumos y medicamentos que, pacientes señalan, escasean en este último centro de atención pública.
Pues fíjese, se buscó en muchas farmacias y no se encontró, entonces es difícil, pues.
La familia tuvo que movilizarse desesperadamente por su cuenta. Tocaron puertas, hicieron llamadas, buscaron en hospitales y clínicas particulares mientras el veneno avanzaba por el cuerpo del padre de Carmen.
Afortunadamente nos pudimos mover, había contactos que nos pudieron ayudar. Hay personas que no tienen el recurso ni tampoco tienen algún contacto que pueda apoyarlos en el tema. Es muy importante el abastecimiento de esos medicamentos, son sumamente escasos, y si uno no se mueve, corre el riesgo de que la persona muera.
Aunque el estado de salud del padre de Carmen evoluciona favorablemente, el caso deja al descubierto una grave falla en el abastecimiento de insumos médicos esenciales, dado que Chiapas es uno de los estados con presencia de arañas y serpientes altamente venenosas.
