Este año ha sido de los más difíciles para los productores de miel, los apicultores sufren los estragos de los incendios y la sequía que afecta a Chiapas, pues en los años 90 se cosechaban hasta 50 kilos por colmena, pero los expertos explican que ahora solo obtienen de 20 a 25 kilos.
Otra de las consecuencias del cambio climático son los cambios en el producto, una miel oscura, otra amarillo ámbar y así van variando su tonalidad, debido a que las plantas no florecen uniformemente.
Con información de Thiaré García