Desde hace nueve años, Erick comenzó a nadar por prescripción médica a modo de rehabilitación, pues padece hemofilia desde que nació, condición que impide la coagulación de su sangre, y que ha sido su motor para seguirse preparando y ahora, estar en las grandes ligas.
En los juegos nacionales, ha ganado medallas de Plata y Bronce por su desempeño, pero se sigue preparando como seleccionado nacional para ganar más, e incluso, llegar a las Paralimpiadas.
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